Desarrollar programas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
Para combatir el cambio climático mundial, es importante reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de la producción de piensos y alimentos. Entre otras cosas, porque el calentamiento global tiene un enorme impacto en la ganadería de todo el mundo. En De Heus nos hemos comprometido con la puesta en marcha de programas destinados a reducir las emisiones en la producción de piensos y la cadena de suministro de alimentos. Al frente de estos programas está Stefan van den Bogaard, director de Tecnología e Inversiones del grupo. En estas líneas, nos habla de las estrategias de De Heus para reducir la huella de carbono global de la empresa y de cómo sus experiencias a nivel local están generando nuevas ideas para soluciones sostenibles.
Proteger a las futuras generaciones
"De Heus ha estado trabajando para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero desde 2018, cuando implementamos nuestro primer proyecto solar en Mandalay, Myanmar", señala Stefan. "Ahora que el Acuerdo de París de 2015 tiene como objetivo alcanzar emisiones netas cero para 2050, y que la Directiva de Informes de Sostenibilidad Corporativa de la UE nos obligará a informar sobre nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, estamos siendo más explícitos sobre nuestras iniciativas de reducción". Pero no es sólo la legislación lo que impulsa a De Heus a reducir su huella de carbono. "Como empresa familiar, nos preocupan las futuras generaciones y queremos minimizar el impacto del cambio climático y reducir las emisiones", añade. "Está en nuestros genes salvaguardar el medio ambiente y cuidar de los medios de vida de las comunidades".
"Está en nuestros genes salvaguardar el medio ambiente y cuidar de los medios de vida de las comunidades".
Reducir las emisiones es un reto
Reducir las emisiones de los procesos primarios en la producción de piensos es todo un reto y no existe una solución única. "Fabricamos piensos triturados y peletizados", explica Stefan. "Los piensos triturados sólo necesitan electricidad, mientras que los granulados y extrusionados necesitan vapor y electricidad". La empresa podría utilizar sólo electricidad para producir vapor, pero por el momento no es económicamente viable y la capacidad de la red energética local a veces no es suficiente para hacer frente al aumento de la demanda de energía. Los paneles solares podrían proporcionar parte de la energía necesaria, pero también hay limitaciones, ya que en algunos países el espacio en los tejados es limitado y es importante que la ubicación de los paneles solares no entre en conflicto con las tierras de cultivo. "También podríamos utilizar biomasa para generar vapor en lugar de carbón o gas, pero ahí nos encontramos con problemas similares", dice Stefan. "En algunos países hay mucha biomasa, pero en otros no está disponible o es demasiado cara. Por ejemplo, ya tenemos varias fábricas de piensos que funcionan con cáscara de arroz, un residuo de la industria arrocera que normalmente se quema o se tira a la basura".
Evitar, reducir o compensar
Ante estos retos, ¿cómo enfoca De Heus sus programas de reducción de emisiones? "Utilizamos una estrategia que llamamos ERC: Evitar, Reducir o Compensar", explica Stefan. "Para reducir las fuentes de energía fósiles, hemos invertido en varias fuentes de energía alternativas, como la biomasa y la energía solar". La empresa ya tiene varios sistemas propios de energía solar en varios países, como España, Portugal, Camboya y Myanmar.
Más recientemente, De Heus firmó un memorando de entendimiento para un proyecto de energía solar que abarca 30 instalaciones propiedad de De Heus y Bel Ga en Vietnam. Es el mayor proyecto de este tipo en el país y, como se espera que genere más de 28 millones de kWh de energía limpia, evitará más de 22.500 toneladas de emisiones de carbono al año. Esto es comparable a la capacidad anual de absorción de dióxido de carbono de un millón de árboles maduros, o a compensar las emisiones de 5.000 coches al año. "El mejor lugar para invertir en energía solar es cerca del Ecuador, donde el sol brilla con más intensidad", continúa Stefan. "Pero también tenemos sistemas solares en tres fábricas y en nuestra granja de investigación porcina de los Países Bajos. Estos sistemas solares contribuyen a reducir los gases de efecto invernadero, pero, como he dicho, tienen sus limitaciones, así que seguimos explorando otras opciones”.
Combinación de calor y electricidad
Una segunda fuente alternativa es la cogeneración, también conocida como producción combinada de calor y electricidad (PCCE), que consiste en la producción simultánea de electricidad, vapor y calor útil a partir de una única fuente de combustible. "En nuestras fábricas de Europa del Este utilizamos sobre todo gas para producir calor y vapor para el peletizado", explica Stefan. "Mediante la cogeneración, parte del vapor se utiliza para generar electricidad. La eficiencia de la cogeneración es mucho mayor que tener una caldera independiente para producir vapor y extraer electricidad de la red local, lo que ahorra una cantidad significativa de emisiones de CO2." En la fábrica de piensos de De Heus en Mieścisko (Polonia), el calor producido por la cogeneración también se utiliza para calentar una sala de tanques donde es necesario mantener calientes los aceites y otros ingredientes.
Biomasa
La biomasa es otra fuente de energía renovable relacionada con la reducción. Un ejemplo llamativo es la fábrica de piensos para acuicultura de De Heus en Vinh Long, en el delta del Mekong (Vietnam). "La producción de piensos para acuicultura requiere mucho vapor", explica Stefan. "En la fábrica de Vietnam, hemos invertido en calderas especiales alimentadas con cáscara de arroz en lugar de combustibles convencionales como el carbón". Este uso de residuos agrícolas está relacionado con el objetivo de De Heus de utilizar más flujos residuales en su producción de piensos. "Tenemos previsto utilizar más biomasa, pero sólo si no se ha cultivado específicamente para la producción de energía", prosigue Stefan. "Por ejemplo, estamos planificando una nueva fábrica en Uganda, donde hay una enorme industria azucarera, y estamos estudiando si podemos utilizar bagazo, un material fibroso seco que queda del procesamiento de la caña de azúcar, o cáscara de arroz para generar energía". Otro país con un gran potencial es Sudáfrica. La nación depende en gran medida del carbón para generar electricidad y vapor, pero se enfrenta a problemas de seguridad de suministro. "Estamos estudiando opciones para la generación de vapor que podrían sustituirse por los abundantes suministros de biomasa disponibles en algunas regiones del país", afirma Stefan.
Métodos de reducción innovadores
En cuanto al pilar de reducción en su estrategia ERC, De Heus busca siempre nuevas formas de aumentar la eficiencia de los procesos primarios de la empresa. Ejemplos innovadores de ello son la utilización del calor residual de la producción de piensos para acuicultura para calefacción y generación de electricidad, y el uso de menos cintas transportadoras en favor de sistemas de cangilones accionados por motores más pequeños y eficientes energéticamente. "También estamos trabajando con nutricionistas de animales y jefes de producto para ver si podemos cambiar en parte los piensos en pellets por piensos en papilla con los mismos resultados", dice Stefan. "Esto reduciría la cantidad de energía utilizada en la producción de pellets, sin embargo, no podemos prescindir por completo del pienso en pellets por razones relacionadas con la cría de animales, la logística y la contaminación".
Compensar las emisiones de gases de efecto invernadero
"Si no podemos evitar las emisiones de gases de efecto invernadero o reducirlas, tenemos que compensarlas, que es el tercer pilar de nuestra estrategia ERC", señala Stefan. "Esto implica medidas como invertir en nuestros clientes para ayudarles a reducir las emisiones o hacer que nuestras materias primas entrantes sean más sostenibles". La compensación también puede implicar que De Heus invierta en parques solares o eólicos fuera de sus propias fábricas. "Los paneles solares por sí solos no nos ayudarán a alcanzar nuestros objetivos de reducción de emisiones", admite Stefan. "Utilizar biomasa y optimizar nuestros procesos primarios puede ayudar, pero si no podemos hacerlo por nuestra cuenta, podemos invertir en fuentes de energía renovables externas y comerciales". Otro ámbito en el que la compensación puede tener un gran impacto es el de las emisiones generadas por el transporte de piensos. "Los camiones contribuyen sustancialmente a las emisiones de gases de efecto invernadero y es una cuestión difícil de abordar desde nuestro lado", dice Stefan. "Así que tenemos la responsabilidad de seguir de cerca la evolución del hidrógeno y los vehículos eléctricos, por ejemplo, y mantener conversaciones sobre esas opciones con el sector del transporte".
Generar ideas a nivel local
Aunque Stefan y su equipo impulsan estos programas, muchas de las ideas para reducir las emisiones proceden de las unidades de negocio locales de la empresa. "Eso es típico de De Heus", dice Stefan. "Somos una empresa global y emprendedora, y utilizamos ideas de distintos países". Un miembro del equipo de Stefan se encarga de dar salida a esas ideas, desarrollarlas y hacer crecer la experiencia de la empresa. "Tenemos que reducir las emisiones de forma coordinada y aprovechar la experiencia de las unidades de negocio locales", prosigue. "Por ejemplo, en varios países africanos, gran parte de la energía es hidroeléctrica, generada a partir del movimiento del agua. En Uganda, se genera a partir del lago Victoria. Estamos estudiando la posibilidad de utilizarla en nuestra nueva fábrica de allí. Es parte del estudio de viabilidad para que la instalación sea neta cero desde el principio". En Vietnam, De Heus también está en las primeras fases de investigación sobre la posibilidad de generar electricidad a partir de redes inteligentes con una combinación de energía solar y almacenamiento en baterías.
"Tenemos que reducir las emisiones de forma coordinada y aprovechar la experiencia de las unidades de negocio locales".
Responsabilidad personal
Aunque De Heus como empresa aborda la sostenibilidad a gran escala, también quiere inspirar a los empleados para que se responsabilicen del medio ambiente a nivel personal. Del mismo modo que la empresa quiere reducir las emisiones de los procesos operativos, las personas también pueden hacer cambios en su propio entorno inmediato, por ejemplo, compartiendo coche.
Gases de efecto invernadero y marca del empleador
Más allá de los beneficios medioambientales de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, todas estas iniciativas contribuyen a hacer de De Heus un empleador atractivo para las generaciones actuales y futuras. "Cuando abrimos nuestra fábrica en Myanmar, con sus paneles solares y su caldera de cáscara de arroz, un empleado me dijo que estaba orgulloso de trabajar para De Heus porque nos preocupamos por el medio ambiente", explica Stefan. "En una entrevista de trabajo, mi generación preguntaba: ¿Hacéis algo por la responsabilidad social de las empresas? Los jóvenes de hoy preguntan: ¿Qué hacen ustedes en materia de responsabilidad social corporativa? Nuestra licencia para operar es que cuidamos del futuro".